Capitulo 6 (:

POV Bastean

Química transcurrió entre ronquidos de algunos de mis compañeros, y uno que otro celular o bostezo ocasional.


La verdad el aburrimiento me hubiera matado si no me hubiese concentrado en la linda pelirroja que estaba a solo un asiento de distancia. Parecía garabatear en una libreta que tenia sobre su mesa. Parecía muy concentrada en lo que hacía. Obviamente no eran problemas que resolver, pues en toda la clase su mirada estuvo fija en la misma hoja. Después de una hora sentado en mi lugar, con los codos apoyados en la mesa y la mirada fija en Mía, no me quedaba más remedio ponerme al corriente con la clase que estaba dando el señor Carrigan.

El chico de cabello rizado al estilo afro que estaba sentado a mis espaldas toco mi hombro para llamar mi atención. Extrañado voltee mientras que este se sonrojaba y me tendía una nota escrita con la letra en color rosa.

Estaba escrita con una impecable caligrafía y corazones sobre las íes:

“Te espero en la cafetería. XOXO Britt.”

Ok… el chico…yo voltee y le hice una señal con la ceja, la cara del muchacho ya de por si pálido quedo totalmente carente de color.

-No es mío viejo- dijo él- dice Britt. ¿Tengo cara de Britt?

-¡Jóvenes! - nos reprendió el profesor. Cuando este se dio la vuelta, el chico del afro señalo a la mesa de al lado. Una rubia de ojos celestes me saludo con sus dedos coquetamente. ¿Así que tenía una cita? Y yo que pretendía pasar esa hora conociendo a cierta señorita.

La campana sonó y antes de que me diera cuenta Mía estaba saliendo de manera apresurada por la puerta.

Al salir me dirigí hacia mi casillero a unos metros del baño de hombres. Matt y Ty salían de él.

-Hey principito!!- dijo Tyler de manera jovial. Yo los salude mientras Matt me daba unas palmadas en la espalda.

-Escuchamos que tenías una cita con Cruela Devil.

-¿Quién?-pregunté.

- Brittney Nelson. Cruela para los amigos – la sonrisa de Matt se hizo más grande, al parecer a esa chica la querían mucho, pensé con sarcasmo.

-Al parecer así es- dije mientras levantaba mi mano mostrándoles la nota que Britt me había pasado.

-Amigo estas en un gran lio- dijo Ty – Me agrado tenerte en casa, fue divertido.- Tyler me puso la mano sobre el hombro, parecía una condolencia.

-¿Por qué dices eso?

-Porque Principito, cuando Mía se entere de que si quiera te vistes con La Barbie Nelson va a echarte a patadas de la residencia.-dijo Ty mientras Matt movía la cabeza de forma negativa.

-Vamos chicos- dije restándole importancia- ¿Qué podría pasar?

-Te lo advertimos- dijo Matt.

Los tres nos encaminamos hacia la cafetería de la escuela. No entendía exactamente la conexión entre Mía y esta chica Brittney, pero si eso me servía para ponerla un poco celosa, que así fuera.

Minutos después estaba entrando por una puerta doble de vidrio con pasamanos de metal. Algo así como una exclamación salió de la boca de todos cuando entramos al lugar. Era bastante grande, como el salón de baile del palacio donde yo vivía. Solo que este era totalmente blanco y celeste, y tenía muchas mesas. Muchos había dejado de comer y otros estaba hablando muy bajito.

Con la mirada peine cada mesa en busca de Mía, o en su defecto a Cloe, porque siempre estaban juntas. Pero en vez de encontrar a la pequeña pelirroja, encontré a la esbelta chica de cabello rubio pálido. Ella movió delicadamente su mano, haciéndome señal de que me acercara. Como si de un imán se tratase centre la mirada dos mesas después donde una ceñuda Valery me miraba. Frente a ella estaba Cloe y Mía que estaban de espaldas a mí.

-¿Y?- preguntó Matt- ¿Qué harás?

-Cinco minutos- dije.

 POV MIA

-No puedo creerlo- dijo Valery exasperada. Yo estaba concentrada leyendo un libro muy bueno. Valery solía reaccionar de esa forma por muchas cosas. Mmmm… casi siempre la ignoraba, así que volví a retomar la lectura.- No, no, no… lo juro ese príncipe de pacotilla me va a escuchar- solo con la mención de Bastean mi pulso se acelero, como si me hubiesen inyectado adrenalina. Miré a Valery y luego hacia donde ella estaba mirando. En las puertas de la cafetería estaban Matt, Tyler y… Bastean estaba caminando hacia una sonriente Brittney que le hacía señales con su manicure francesa. Me repetí una y otra vez en el lapso que le tomo a Bastean llegar junto a Britt, que no era de mi incumbencia, no éramos nada, NADA, ni siquiera amigos… ¡Mierda! ¿A quien quería engañar? Mis manos sudaban frio y mis mejillas ardían de manera dolorosa. Si eso no eran celos, no conocía otra palabra parecida a esa. No me importa, es su problema, pensé.

-Puedo apostarte que ella ira detrás de él- dijo Matt en cuanto se acerco a la mesa.-y el principito caerá.

-No estoy muy seguro-dijo Ty mientras me miraba. Mis mejillas ya de por sí doloridas, empezaron a arder aun más. Gracias al cielo no era tan blanca como Cloe o se notaria mucho.- ¿Tu qué opinas Mía?

-¿Yo?- pregunte confundida.

-No hay otra sentada junto a nosotros.-dije Valery- Por favor deja a Jace Wyland(1) en paz y vuelve a la tierra con los Mundanos(2) ¿sí? – La verdad era que cuando empezaba a leer me olvidaba del resto del mundo. Y así me gustaba.

-Yo tampoco quisiera soltar el libro si el bomboncito de Alec fuera real- Ty emitió un suspiro y todos le lanzaron comida en la cabeza. Las risas estallaron en la mesa. Conocíamos la novela, y todo gracias a Kate. Era una lectora compulsiva y por lo tanto nos persuadió, o mejor dicho nos obligo a leer la saga de Cassandra Clare, ninguno se quejo, bueno con la excepción de Matt que decía que no abriría un libro, aunque su vida dependiera de ello. De todas maneras lo hizo y quedo prendado de una de los personajes. En todo caso, podría decirse que Katherine era el objeto de estudio de muchos psicólogos. Tenía el cabello negro largo, con extensiones de colores estridentes. Su tez era pálida, y en contraste con su maquillaje negro, sus ojos parecían aun más oscuros. Vestía realmente bien, para tener un estilo tan… ¿rockero? Pero no tenía malos hábitos como muchos pandilleros de la escuela.  Es más, era buena estudiante.

-¿A todas estas que hace ese con eso?- pregunto Kate. Como ella no vivía con nosotros, no tuvimos tiempo de presentarle a Basteas. Ella era de Boston, pero su madre decidió mandarla con su padre “por problemas de conducta”. A decir verdad era un poco extrovertida, y rebelde, pero era buena chica.
-Britt le paso una nota en clases-dijo Cloe. ¿Yo había sido la última en enterarme? Al parecer sí.
-Escuche que él la había citado a ella-dijo Matt.

-Sigo insistiendo que el principito no está interesado en Cruela. Nadie me escucha- Ty hizo un puchero. Yo estaba un poco reacia a dar mi opinión al respecto. No es de mi incumbencia, me repetía una y otra vez.

Cuarenta y cinco minutos después, la cafetería estaba vaciándose. Muchos de los estudiantes regresaban a sus casilleros a buscar sus libros, otros a cambiarse para gimnasia, ir a la biblioteca o como yo, mudarme de edificio. Los chicos seguían en la mesa mientras tomaba mi bolso y recogía las cosas que tenia sobre la mesa. Antes de terminar con lo que estaba una voz llamo mi atención.

-Hola chicos- dijo Bastean a mis espaldas. La sangre de mis venas se volvió fría y espesa al igual que mi respiración. No pude escuchar la respuesta que les dieron los demás. Ya estaba corriendo en dirección a la salida.


Estaba agitada por la carrera. Un extraño dolor oprimía mi pecho y… lo odia. Mis ojos escocían de tal manera que me era imposible no echarme a llorar. Pero ¿Por qué? La respuesta era obvia.
Bastean.

No podía cree la manera tan profunda que me afectaba. Y más aun, sabiendo que él ya se había interesado por otra. ¿Y a ti qué? Grito una vocecita en mi cabeza. Yo no era tan bonita como Cloe, ni alta como Valery. Era baja de estatura, no era delgada y esbelta, mi cabello no estaba mal, a veces. ¿En qué momento me había detenía a compárame con mis amigas? Nada de eso me había importado. Hasta ahora.

Dándoles una patada metal a todas aquellas absurdas cavilaciones entre en el baño de chicas a retocarme un poco el labial y verificar que todo estuviera en su lugar. Mirando mí reflejo note que mi creyón de ojos se estaba corriendo un poco gracias a la carrera de hacia un instante. Entre a uno de los cubículos sanitario por papel. Unas risitas sonaron en la puerta.

-Te lo juro- dijo una voz chillona que reconocía bien. Britt.

-Vamos, estas bromeando.- dijo Jess riéndose estrepitosamente.

-Estoy completamente segura de que Bastean me invitara al baile de mascaras.

-¿Cómo lo sabes?-pregunto Jess. Me asome por la rendija de la puerta. Britt sonrió de manera descarada.

-Porque le insinué que el baile seria pronto y que tenía que invitar a alguna chica antes que otros se lo pidieran.

-¿Él que respondió?- Jess apretó el brazo y esta se lo quito de manera asqueada.

-Que se lo pediría cuanto antes – Ambas rieron y luego salieron del baño. Mi estomago se contrajo de una manera tan violenta que sentí vértigo. ¿Cómo era posible? Faltaba un mes para el baile y él estaba planeando invitar a Brittney. 

Saliendo del cubículo un rostro triste y ojos llorosos me devolvieron la mirada. No sabes lo patética que te ves, grito una vez más esa voz en mi cabeza.

-No más- dije mientras me limpiaba con rabia las lágrimas de mis mejillas.


(1) Jace Wyland: es el protagonista de la saga Cazadores de Sombras de Cassandra Clare.
(2) Mundanos: Es un termino para referirse a los humanos utilizado por los Cazadores de sombras y otras criaturas.